
Un
juego de estrategia | BMW 325 IX

Iván Hernández


En
el año 1991, el equipo Sauermann Competición
andaba haciendo su cruzada particular en el Campeonato
de España de Rallyes de Asfalto, teniendo como
máximos representantes a José María
Ponce y José Carlos Déniz, donde llevaban
casi toda la temporada batiéndose en un duelo incesante
y apoteósico con todo un equipo Lancia, y representando
a dicha formación se encontraba el uruguayo Gustavo
Trelles, dignísimo rival y caballeroso en el duelo
final que no salió como a él le hubiera
gustado. Tuvo en este piloto su mayor oposición
al logro de la coronación del Campeonato de España.
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Llegaba
la hora de acudir a la cita mundialista, el Rallye
España - Cataluña, y había
mucho en juego, nada más y nada menos que
ser Campeones de España de Rallyes, toda
una proeza y contribución a la historia del
automovilismo de Canarias, con lo que aquello significaba
y más cuando por aquellos años este
deporte estaba en otro estatus y más consolidado
en nuestra sociedad Canaria. |
Por
lo tanto comenzaba en las cabezas pensantes del equipo
canario el estudio concienzudo de como afrontar la prueba
y como tal, el juego de estrategia para sacar mayor partido
a esa cita mundialista. 35 tramos cronometrados y lo que
más dolor de cabeza supuso, un rally mixto, con
muchos kilómetros de tierra, con lo que había
que jugar bien las cartas. ¿Con que coche se podía
afrontar esta prueba? Pues la solución era el modelo
325 IX, sobre todo por la tracción a las cuatro
ruedas, idóneo para la tierra, donde el propio
José María Ponce nos cuenta un poco como
se gesta esta idea.
José
María Ponce:"Tal y como marchaba el
campeonato en puntuación, en un rally donde predominaba
la tierra ante el asfalto, con el BMW M3 difícilmente
podía sumar los puntos necesario para hacer frente
a la escuadra Lancia, incluso ya estaba casi a punto de
cerrarse la inscripción de la prueba, así
que propuse al equipo participar con este coche 4x4 que
se estaba vendiendo de segunda mano en el concesionario
Sauermann, tenía más de 120.000 Km y era
automático, tuvimos que cambiar segmentos, tapillas
y convertirlo a cambio manual, poner suspensiones y medidas
de seguridad. El motor era absolutamente de serie.
Sobra
decir que por estrategia esperamos a última hora
para inscribirnos y coger por sorpresa a nuestros contrincantes
en él título. El resultado ya lo saben,
salió bien y logramos culminar la temporada con
éxito"


La
estrategia dio sus frutos, y aunque antes de terminar
los últimos tramos ya se sentían Campeones
de España de Rallyes de Asfalto, ya que Trelles
no pudo culminar la prueba, los canarios durante
todo el rally iban ganando su clase y los tiempos
en la tierra no estaban tan lastrados como en un
principio se preveía, teniendo en cuenta
con la unidad con la que tomaron la salida . |
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OBJETIVO
LOGRADO
Trajeron
a Canarias el logro de ese primer título, se dieron
un baño de multitudes en innumerables lugares,
fueron recibidos por todas las entidades públicas,
Ponce, dio el saque de honor en un partido de la U.D Las
Palmas e incluso apareció en las campanadas de
fin de año en Televisión Española
en Canarias, en definitiva, se valoró ese logro,
el triunfo y el resultado de ese juego de estrategia con
el que culminó la magnífica temporada de
1991.
Y
la pregunta es ¿Una vez ya logrado el campeonato,
a donde fue a parar ese coche?
Pues
después de toda la guerra que dio con batalla ganada
incluida, se reconvirtió a un coche de calle y
se vendió a un alto directivo de la empresa, a
partir de ahí, ha pasada por diferentes propietarios,
y hasta el día de hoy, que curiosamente se encuentra
a la venta.

Iván Hernández
